La Vega, R.D. – La comunidad de Soto, en este municipio, vive momentos de angustia y frustración ante la paralización de la construcción de su escuela, una obra que se encuentra en más de un 70% de avance y cuya detención ha dejado a decenas de niños y niñas estudiando en condiciones precarias.
Los residentes, junto a padres, profesores y estudiantes, se manifestaron pidiendo la intervención urgente del Ministerio de Educación, ya que la falta de un plantel adecuado ha obligado a impartir docencia en el club comunitario, aceras, patios y contenes.
“Es un dolor ver a nuestros hijos tomando clases en el suelo y bajo el sol. La escuela está casi lista, solo falta voluntad para terminarla”, expresó una madre visiblemente indignada durante la protesta.
La obra, que representa una esperanza para cientos de familias de Soto y zonas cercanas, se mantiene detenida sin explicaciones oficiales, generando malestar y preocupación entre los comunitarios.
Los manifestantes hicieron un llamado al ministro de Educación y a las autoridades veganas para que gestionen la reanudación de los trabajos y así garantizar un espacio digno donde los estudiantes puedan recibir su formación.
“Queremos una educación de calidad y una escuela terminada. Soto también merece desarrollo”, proclamaron.









