Mientras vigila la evolución y trayectoria de la tormenta tropical Melissa, con posibilidades de convertirse en huracán próximamente, Cuba vive un empeoramiento de la crisis sanitaria con un reporte oficial de más de 13,000 “casos febriles”.
Las autoridades mantienen el calificativo de “complejo” para el escenario epidemiológico, marcado sobre todo por la circulación de varias arbovirosis como el dengue y el chikungunya. Lee más: Viajes sin visa: Embajada tiene ‘excelentes noticias‘ para cubanos que quieren salir de la isla Tales virus son trasmitidos por la picadura del mosquito.
El gobierno cubano afirma que no cuenta con los recursos para emprender campañas de control del vector, al tiempo que llama a la población a tomar medidas. Más de 13,000 ‘casos febriles‘ La viceministra de Salud Pública de Cuba, Carilda Peña García, en una reciente conferencia de prensa, advirtió del incremento de casos febriles en la isla.
“En la última semana se reportó un aumento significativo de casos febriles, con 13,071 nuevos registros, cifra que supera ampliamente los reportes anteriores y refleja tanto la presencia real de la enfermedad como el fortalecimiento del sistema de vigilancia epidemiológica, que actúa desde los primeros síntomas sin esperar confirmación clínica”, afirmó, según un reporte del diario oficialista Granma.
En el caso del chikungunya, comentó que había una “circulación activa” en más de 10 provincias cubanas, con mayores focos en La Habana y Matanzas. Además, actualmente 12 provincias muestran la mayor evidencia de transmisión de dengue, entre ellas, Guantánamo, Ciego de Ávila, Matanzas, Cienfuegos, La Habana, Villa Clara, Sancti Spíritus y Camagüey.
La funcionaria subrayó la escasez de recursos para aplicar fumigaciones masivas en Cuba, mientras el gobierno “ha priorizado los estratos de mayor intensidad de transmisión, garantizando el uso de insecticidas y abate en las zonas más afectadas”.
Según las fuentes oficiales cubanas, la presencia de chikungunya se confirmó luego de su introducción en el municipio de Perico, provincia de Matanzas, en julio pasado, pero ahora la enfermedad se ha extendido a prácticamente todo el país.









