La coordinadora nacional de la Comisión de Cárceles y coordinadora de la Defensa Pública de La Vega, Elizabeth Rodríguez, abogó por el cierre total o readecuación inmediata del Instituto Preparatorio de Menores Doctor Máximo Antonio Álvarez, ante las condiciones precarias en las que viven los niños y adolescentes privados de libertad en este centro, quienes claman porque se les lleve educación de calidad.
“El centro de privación especializado, porque le cambiaron el nombre, mas no la infraestructura ni las condiciones para llamarse un centro especializado como debería ser y como manda la ley, hay que demolerlo. Nosotros como Comisión de Cárceles, hemos sido enérgicos en la solitud del cierre total del centro de La Vega, eso no está apto para reeducar y rehabilitar a ningún adolescente”, estableció Rodríguez.
Elizabeth califica de “penosa”, la situación en este centro y otros del país, que se supone deben contribuir en devolverle a la sociedad menores que han infligido la ley en condiciones rehabilitadas, para evitar que vuelvan a cometer un hecho.
Establece que en la mayoría de los casos de los niños y adolescentes que delinquen, vienen de familias disfuncionales, y no han tenido oportunidades para poder estudiar, por lo que cuando llegan a un centro de detención, lo mínimo que deben recibir es educación.
Puntualiza que en el centro de la vega, no cuentan ni siquiera con un distrito escolar donde puedan recibir docencia y un título avalado por el Ministerio de Educación (MINERD), sino que los estudiantes reciben el pan de la enseñanza a través de Radio Santa María.
Asimismo, INFOTEP que está en la obligación proveer formaciones técnicas, hace unos pocos meses que llegaron al centro de La Vega solo con dos cursos disponibles.
La coordinadora de la Defensa Pública de La Vega, indicó que anteriormente, los adolescentes privados de libertad eran trasladados a tomar docencia en una escuela del entorno, pero luego se decidió que esto podría poner en riesgo a los demás estudiantes, por lo que se canceló esta práctica.
“Nosotros como Defensa Pública vivimos constantemente dándole charlas a esos adolescentes y una de las cosas que ellos nos manifestaron es que ellos están cansados de que nosotros vayamos a darle charlas e inducción, que ellos lo que necesitan es estudiar y prepararse”, dijo.
“Hago un llamado de humanidad, por los jóvenes de La Vega, que nos han dicho que ellos quieren estudiar, que quieren que sus condiciones mejoren”, puntualizó.
Asimismo, establece que otro tema que les llama a la atención, es la alimentación, debido a que los comedores económicos están enviando los alimentos crudos en muy mal estado, incluso el arroz ha llegado con gusanos, situación que se replica en otros centros de detención del país, tanto de menores como de adultos.
“El Estado está en la obligación de suministrar todo lo necesario a un privado de libertad. Las condiciones mínimas de detención, como lo establecen las reglas de Mandela, de la cual el país es signatario”, expresó.
También, indicó la preocupación de la Defensoría Pública en cuanto a la seguridad, estableciendo que solo cuentan con personal de la Policía Nacional, lo que implica poca seguridad y ha facilitado el escape y agresión de los menores. Asimismo, han tenido reportes del centro Cuidad del Niño, donde menores han sido torturados.
El Informe de las Condiciones de Detención y de Prisión de 2023, realizado por la Defensoría Pública del país, puntualiza las condiciones en las que se encuentra este centro, y de acuerdo a Elizabeth Rodríguez, son exactamente las mismas en la actualidad.
De acuerdo al documento, este centro no cuenta con una estructura adecuada, las instalaciones presentan un notable deterioro, grietas, destrucción, zonas débiles por el paso del tiempo, humedad y filtraciones.
Las camas no son actas para personas, mucho menos para niños, considerando que se trata de una estructura en concreto a la que se le coloca un delgado colchón, estando una al lado de otra, habiendo más de 20 por pabellón, donde los jóvenes duermen todos juntos, señala.
Asimismo, en cuanto a la salud, establece que el centro cuenta con 1 doctor y 3 enfermeras, quienes examinan los menores en conflicto con la ley inmediatamente ingresan al centro, manteniendo un historial médico de estos, de cuantas veces asisten a consulta, padecimientos y patologías.
El doctor, a pesar de no contar con todos los medicamentos y materiales, por escases del suplidor que es la Procuraduría, solicita donaciones, pudiendo dar atenciones a los jóvenes y refiriéndolos al hospital, cuando el tratamiento lo amerite.
Sobre la comida, destaca que hay mucha deficiencia, escaseando los alimentos, especies, vivires y azúcar. Indica que las zanahorias y plátanos son rechazadas porque terminan dañándose ya que no tienen cuarto frío para la conservación de los alimentos, sobre todo, de las carnes; sólo un frízer que no da abasto y a pesar de solicitar otro frízer, los intentos no han tenido efecto.
En ese sentido, los alimentos no son suficientes, en su mayoría de mala calidad, no se conservan correctamente.
A esto se le suma el mal estado de la cocina, la cual se encuentra deteriorada, presentando humedad, moscas y falta de higiene, a pesar del trabajo de los empleados, debiéndose mucho estas situaciones a las malas condiciones de la estructura del centro, según indica el informe.









