Otra ventaja de dos dígitos. Otro colapso al final del partido.
Y otra derrota de los Nets, esta vez ante los Bulls, 116-110, el jueves en Chicago.
Brooklyn ganaba 92-80 en los últimos segundos del tercer cuarto, luego permitió una racha de 27-9 que se extendió hasta el cuarto.
Convirtió una ventaja de 12 puntos en un déficit de seis puntos del que los Nets nunca se recuperaron.
Y fue la cuarta vez en los últimos cinco juegos que los Nets desperdiciaron una ventaja de al menos 12 puntos en una derrota.
Es fácil desanimarse cuando pierdes ventajas de dos dígitos varias veces en el último cuarto, simplemente por mala ejecución, malos tiros, mala defensa una y otra vez. Te desgasta. Así que tenemos que encontrar la manera de combatirlo, superar ese tipo de actuaciones, aprender de ellas y aprender a mejorar.
El lado positivo para los Nets (22-44) fue pasar al quinto lugar en la carrera por la lotería, medio juego por delante de Filadelfia y un juego por delante de Toronto.
Cam Thomas anotó 24 puntos, 10 asistencias (la mejor marca de su carrera) y capturó seis rebotes. Nic Claxton anotó 18 puntos y capturó 14 rebotes.
Pero los Nets fueron superados en trabajo y esfuerzo en el último cuarto y perdieron por novena vez en 10 partidos.
Con Josh Giddey fuera de juego, los Bulls dirigieron la ofensiva a través de Coby White, quien anotó 31 puntos, el máximo del partido.
Pero los Nets, que ganaban 92-80 a segundos del final del tercer cuarto, se quedaron fríos al permitir ese blitz de 29-7. Encestaron 4 de 19 tiros de campo, solo 1 de 7 triples, con tres pérdidas de balón durante esa racha de los Bulls, que los desplomó en la recta final.
“Consiguieron muchas canastas en transición, puntos de segunda oportunidad. Esa fue la historia del cuarto periodo”, dijo Thomas. “No hicimos un buen trabajo de contención… y ellos se llevaron la victoria”.
