LA VEGA. – El recién designado director del Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) El Pinito, Bernardo Henríquez Maldonado, reconoció que el tráfico de drogas en las cárceles es un problema persistente y que su ingreso se da de manera similar a como ocurre en cualquier barrio del país.
Sus declaraciones surgen en medio de una investigación sobre la muerte del recluso Wilber Nicolás Vargas, alias «El Guardia», quien habría sido envenenado dentro del penal. Por este caso, el Ministerio Público mantiene bajo arresto a siete agentes penitenciarios, quienes están siendo investigados por su presunta vinculación con el hecho.
Siete agentes penitenciarios detenidos
Las autoridades identificaron a los agentes detenidos como Julio Alcibíades Montas Pérez, Roberto Belarminio de la Rosa Tejada, José Luis Agramonte Sención, Yohenny Daury Mora Moreta, José Benjamín Jer. Estos fueron arrestados en operativos realizados en el sector Doña Ana, en Yaguate, San Cristóbal.
Un historial de irregularidades en las cárceles
Henríquez Maldonado asumió la dirección del CCR El Pinito tras haber estado al frente del CCR La Isleta, en Moca, donde en diciembre pasado el recluso Edwardo de Jesús Cruz García, de 23 años, falleció luego de participar en un supuesto «concurso de consumo de drogas».
Al referirse a ese incidente, el director señaló que el caso «agotó todo su proceso» y que en su momento se tomaron las medidas correspondientes. Sin embargo, evitó ofrecer detalles sobre las acciones implementadas para evitar la repetición de situaciones similares en otros centros penitenciarios.
Cuestionado sobre la presencia de sustancias ilícitas en los recintos carcelarios, Henríquez Maldonado sostuvo que se trata de una problemática generalizada y que existen múltiples métodos utilizados para introducirlas.
«Lamentablemente, este flagelo no es exclusivo de las cárceles; la droga también está en cualquier barrio de este país. Existen muchas maneras, herramientas y estrategias que se emplean para hacerlas llegar a los internos», manifestó.