La mujer que cumple cadena perpetua por el asesinato en 1995 del ícono tejano Selena ha presentado la documentación para intentar ser liberada el próximo año, mientras los reclusos le dicen a The Post que hay "una recompensa por su cabeza" tras las rejas.
Un representante del Departamento de Justicia Penal de Texas dijo que la asesina Yolanda Saldívar, ahora de 64 años, no tiene manchas en su historial que impidan que la junta de libertad condicional celebre una audiencia en marzo para determinar si la libera.
Saldívar disparó fatalmente a la superestrella de 23 años, la “Reina del Tejano” Selena Quintanilla-Pérez, el 31 de marzo de 1995, en una habitación de hotel en Corpus Christi, Texas, durante un enfrentamiento.
Selena creía que Saldívar, uno de los fundadores de su club de fans, había malversado más de 60.000 dólares y el cantante planeaba despedirla.
La convicta, que se encuentra en la Unidad Patrick L. O’Daniel en Gatesville, Texas, que también alberga a las mujeres del estado condenadas a muerte, ha mantenido durante mucho tiempo que no tuvo la intención de matar a Selena y que su muerte fue accidental.
“La opinión pública me condenó incluso antes de que comenzara mi juicio”, dijo Saldívar en una entrevista en prisión para el documental de Peacock del año pasado: “Selena y Yolanda: Los secretos entre ellas”.
Ella sostuvo que en ese momento su intención era suicidarse, no matar a Selena.
Pero un jurado no le creyó y la condenó a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional después de 30 años.
Un familiar de Saldívar dijo recientemente al Post que la asesina se siente como si fuera una “prisionera política” tras las rejas y que cree que ha pagado su deuda con la sociedad.
“Mantenerla en prisión no va a servir de nada”, dijo el primo. “Es hora de que salga”.
Los reclusos de la prisión donde se encuentra detenida Saldívar dijeron a The Post que ella es constantemente objeto de ataques, lo que la obliga a permanecer alojada en custodia protectora.
“Todo el mundo sabe quién es Yolanda Saldívar”, dice Marisol López, quien estuvo en prisión junto a ella entre 2017 y 2022. “Hay una recompensa por su cabeza, como si todos quisieran un pedazo de ella. Los guardias la mantienen alejada de los demás, porque la odian mucho. Si saliera [entre la población general], alguien intentaría acabar con ella”.
Otra ex reclusa, Yesenia Domínguez, dijo que Saldívar siempre fue un tema común de discusión en el patio de la prisión.
“Todo el mundo decía siempre: ‘Déjame hablar cinco minutos con esa zorra’”, dice Domínguez. “Todo el mundo quería justicia para Selena. Tiene un objetivo en la espalda”.