Hassan Nasrallah, el secretario general del grupo terrorista Hezbollah, respaldado por Irán, murió en un ataque aéreo israelí en Beirut el viernes en lo que constituye una importante escalada en la acción militar de Israel en el Líbano, según las Fuerzas de Defensa de Israel.
“Hassan Nasrallah ya no podrá aterrorizar al mundo”, afirmó el ejército israelí en X el sábado.
Nasrallah, de 64 años, estaba en un búnker debajo de la sede principal del grupo en Beirut el viernes cuando aviones de guerra israelíes lanzaron bombas que "arrasaron seis edificios" y eliminaron a varios jefes de Hezbolá en un ataque dirigido contra el líder terrorista de larga data.
Las Fuerzas de Defensa de Israel confirmaron que también neutralizaron a Muhammad Ali Ismail, comandante de la unidad de misiles de Hezbolá en el sur del Líbano, así como a su adjunto, Hussein Ahmad Ismail, y a otros “comandantes y operativos” que asistieron a la reunión.
Este último ataque se produjo después de que Israel matara a tres altos mandos militares de Hezbolá a principios de semana. Según se informa, esos ataques mataron a más de 700 soldados y civiles.
Nasrallah fue miembro fundador del grupo militante respaldado por Irán y sirvió como su único líder desde 1992, cuando su predecesor y cofundador Abbas al-Musawi también murió en un ataque aéreo israelí.
Los funcionarios israelíes dijeron a The Post que Nasrallah estaba en el centro del “Eje de Resistencia” de Irán. Su muerte se considera una importante victoria en la campaña en curso contra las fuerzas hostiles regionales tras el mortal ataque de Hamás del 7 de octubre contra Israel.
Las FDI publicaron una advertencia en su cuenta X después del ataque.
“Hezbolá tiene más de 150.000 cohetes destinados a matar a civiles israelíes”, se lee en el texto. “Algunos están colocados estratégicamente debajo de la población civil.
“Hemos pedido a los civiles libaneses que viven en edificios específicos del barrio de Dahiya que se alejen de las zonas utilizadas por Hezbolá”.
El ataque contra Nasrallah el viernes fue seguido por otra serie de atentados con bombas en Beirut a primera hora del sábado. Estas acciones se consideran en general una peligrosa escalada de la guerra en curso en la región.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por que estos bombardeos en el Líbano conduzcan inevitablemente a una guerra aún más amplia en el Oriente Medio.
“Las ondas de choque que irradian la muerte y destrucción sin precedentes en Gaza ahora amenazan con empujar a toda la región al abismo”, dijo el viernes el Secretario General de la ONU, Antonio Gutiérrez, al Consejo de Seguridad.
“La guerra en el Líbano podría conducir a una mayor escalada que involucre a potencias externas”.