Coca-Cola anunció el viernes que pagará 6.000 millones de dólares en impuestos atrasados e intereses después de un fallo en un caso que se remonta a casi 20 años con el IRS.
La disputa cubre los años fiscales 2007-2009, cuando el IRS afirmó que Coca-Cola debería haber reportado un ingreso mayor como resultado de los precios de transferencia internacionales.
“La compañía espera la oportunidad de iniciar el proceso de apelación y, como parte de ese proceso, pagará la responsabilidad y los intereses acordados”, dijo Coca-Cola en un comunicado.
La compañía de refrescos dijo que planea apelar el fallo, que fue dictado en dos frases por el juez del Tribunal Fiscal de Estados Unidos, Albert Lauber.
Según The Wall Street Journal, Coca-Cola, con sede en Atlanta, dijo en una presentación reciente que actualizaría sus reservas fiscales si la compañía no gana su apelación.
Coca-Cola tiene 90 días para solicitar una revisión de la decisión ante un tribunal federal de apelaciones.
El Wall Street Journal informó que la compañía cree que “es más probable que no” que el tribunal de apelaciones no anule sus posiciones fiscales, según un informe regulatorio.
