Una reina de belleza de Indiana se vio envuelta en una gran redada de drogas con vínculos con un cártel mexicano que lleva años en desarrollo.
Glenis Zapata, de 34 años, quien fue coronada Miss Indiana Latina en 2011, supuestamente usó su trabajo como asistente de vuelo para mover dinero de la droga desde Chicago a los estados del sur y a México, según una acusación federal.
Está acusada de dos cargos de lavado de dinero derivados de un transporte de efectivo por valor de 170.000 dólares el 7 de agosto de 2019 y de al menos 140.000 dólares el 10 de septiembre de 2019.
Zapata fue uno de los 18 sospechosos arrestados cuando la policía federal detuvo a su objetivo principal, Oswaldo Espinosa, quien estaba entre los fugitivos más buscados por la Administración de Control de Drogas (DEA).
Espinosa es el presunto líder de una red de narcotráfico multimillonaria con sede en México que inundó las calles de Estados Unidos con miles de kilogramos de cocaína, según la última acusación federal presentada el 16 de mayo.
De 2018 a 2023, Espinosa reclutó a trabajadores aparentemente comunes y que pasaban desapercibidos, como Zapata, como parte de su supuesta empresa criminal, que utilizaba almacenes y garajes por toda la Ciudad de los Vientos para ocultar dinero y drogas.
Se cargaban dinero en efectivo y cocaína en camiones semirremolque y en aviones desde los escondites del Medio Oeste hacia la parte sur de Estados Unidos y México, “incluso a través de vuelos comerciales y con la ayuda de Glenis Zapata”, alega la acusación.
Espinosa era el jefe de su propia organización mexicana de narcotráfico internacional (OTD), llamada Espinosa DTO, según documentos judiciales.
El último expediente, que incluyó los cargos contra Zapata, detalló ocho operaciones de narcotráfico de 2021 a 2023 y 15 transportes de efectivo entre noviembre de 2019 y marzo de 2022.
La investigación sobre Espinosa fue encabezada por el Grupo de Trabajo Antidrogas contra el Crimen Organizado, que fue creado para atacar a las principales redes de narcotráfico en Estados Unidos.
El DTO de ESPINOSA es un cártel pequeño en comparación con potencias como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa de El Chapo, que controlan casi todo México y sus puertos marítimos y extienden sus tentáculos por todo Estados Unidos.
En total, los investigadores estiman que hay alrededor de 150 cárteles mexicanos de diversos tamaños con alrededor de 175.000 “miembros activos” (a partir de 2022), según un estudio de Science de septiembre de 2023.
Y muchos de estos sindicatos del crimen organizado extienden sus negocios ilegales a Estados Unidos y contrabandean drogas y dinero a través de la frontera.
Un informe de la DEA de mayo dijo que los “cárteles más poderosos y despiadados” de México (los cárteles Jalisco Nueva Generación y Sinaloa) operan en los 50 estados.
Los productos principales de ambos cárteles son la metanfetamina y el fenantilo, según el informe, que dice que los cárteles mexicanos han "causado la peor crisis de drogas en la historia de Estados Unidos".
Desmantelar las principales operaciones de drogas es uno de los principales objetivos de las agencias federales encargadas de hacer cumplir la ley.
En 2023, las agencias encargadas de hacer cumplir la ley dentro de 150 millas de la frontera realizaron casi 600 incautaciones de efectivo en grandes cantidades valoradas en 18 millones de dólares, según el informe de la DEA.
"La principal prioridad operativa de la DEA es perseguir y derrotar implacablemente a los dos cárteles de la droga mexicanos… que son los principales responsables de impulsar la actual epidemia de envenenamiento por fentanilo en los Estados Unidos", dice el informe.
