El Gobierno mexicano ha cedido a la presión y ha aplazado la subida de los precios de las gasolinas para las próximas dos semanas. La Secretaría de Hacienda y Crédito Público ha anunciado este viernes que suspenderá los ajustes a los costes de los combustibles del 4 al 17 de febrero ante un panorama económico estable que le permite detener su calendario para la liberación de los precios de las gasolinas en todo el país.
La medida llega después de que el Gobierno mexicano elevó, el 1 de enero, los montos máximos para adquirir combustibles hasta un 20%. El alza provocó numerosas protestas y llevó a los empresarios y a la clase política ha elevar las presiones sobre la administración del presidente Peña Nieto para evitar una nueva subida.
“La evolución reciente del tipo de cambio y del precio internacional de las gasolinas han creado las condiciones para mantener sin cambios los precios máximos durante el periodo señalado”, ha explicado la Hacienda mexicana en un comunicado.
Inicialmente, las autoridades habían diseñado un calendario en el que los costes de los combustibles cambiarían semanalmente en los primeros 15 días del mes, para luego comenzar una fluctuación diaria a partir del 18 de febrero. El gobierno aún no ha descartado la posibilidad de continuar con el plan de liberación de precios en la segunda mitad del mes.
Para conseguir que los precios se mantengan estables durante las próximas dos semanas, la administración de Enrique Peña Nieto ha ordenado, mediante un decreto, estímulos fiscales —a través del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS)— para quienes importen combustibles.
Este medida, según el decreto, estará vigente hasta el 11 de febrero. Los precios máximos de las gasolinas en el país se mantendrá en 15,99 pesos por litro para el combustible Magna, 17,70 pesos para la gasolina Premium y 17,05 pesos para el diésel.