El arzobispo emérito de Santiago, monseñor Ramón Benito De la Rosa y Carpio, llamó a todos los sectores a unificarse para que juntos puedan enfrentar la delincuencia y la inseguridad ciudadana que afecta al país.
“La lucha contra la delincuencia debe ser un trabajo en conjunto de todos los sectores de la sociedad, no solo de la policía nacional, las fuerzas armadas y la justicia, sino de la sociedad en sentido general”, manifestó.
Al referirse al caso de John Emilio Percival Matos, dijo que es un caso sumamente penoso porque involucra a familias acomodadas y muchas veces respetable en la sociedad.
Expuso que los hijos de esas familias “acomodadas y respetables” muchas veces terminan muertos o en las cárceles por delitos cometidos.
Explicó que de la situación de inseguridad que vive la población no ha escapado la iglesia Católica que se vio obligada a suspender la “Misa del Gallo” que se celebra a medianoche todos los años y las “Mañanitas”, una costumbre de los católicos en la época de Navidad.
Dijo que esas tradiciones no solo se celebraban en el país, sino en todo el mundo católico, y ahora en República Dominicana no se puede celebrar porque los feligreses tienen temor de acudir temprano o a medianoche a las iglesias.
“Esa era una bonita tradición de la gente juntarse a medianoche o en la madrugada en los templos a compartir y tomarse un jengibre, pues ya esas costumbres no se pueden llevar a cabo porque existe temor en las personas por los delincuentes”, dijo.
De la Rosa y Carpio dijo que espera que todo eso cambie, que vuelvan a celebrarse en el país el próximo año esas tradiciones para poder compartir otra vez en épocas navideñas.
“Lo que nosotros queremos decir es que existe ese temor hasta en las cosas de la iglesia, que la iglesia no está exenta de la delincuencia y la inseguridad ciudadana”, enfatizó.