EDACCIÓN DL. Nick Kyrgios, un australiano que se ubica esta semana en el puesto 16 del mundo, se ha sincerado en una entrevista con el periódico The Straits Times donde deja claro sus motivos para jugar, unos que lucen “políticamente incorrectos”.
“Ser el número 1 del mundo no es algo que me motive especialmente, para ser honesto”, revela el de Canberra. “No es algo que desee ser. Tanto si soy el 13º o el 20º del mundo, no me supone gran diferencia para mí”, agrega. Nicholas tiene incluso palabras para todos aquellas personas del mundo del tenis que durante estos últimos dos años han intentado hacerle entrar en razón. “No me importa nada, siendo sincero. Tengo a gente diciéndome lo que debería hacer y cómo debería actuar, cada día y no me importa nada”, admite.
El periodista reaccionó preguntando: ‘¿Y por qué juegas al tenis?’, a lo que el ganador de US$1,7 millones en 2016 y actual número 13 del planeta respondió. “Porque desafortunadamente, todos necesitamos dinero, ¿no es así?”. Cuando le preguntan si no le gustaría ser ganador de Grand Slam, el australiano sólo atisba a decir un “sería divertido”.
Al preguntársele en qué lugar ubicaba el tenis en su vida tampoco dejó de sorprender. “Al final del día, no me lo tomo todo demasiado en serio. Sólo estamos jugando al tenis. No importa. Hay más problemas en el mundo sobre los que pienso. El tenis es demasiado pequeño en mi esquema de cosas”.
Cuando le preguntan por amor a un deporte, lo tiene claro. “Amo todo lo que envuelve al baloncesto. El sonido, la pelota, la pista, el ambiente”, confiesa.
Entonces, ¿por qué el tenis? “Me encanta todo lo que mueve el tenis. Me gusta el dinero, el estilo de vida. Estoy bendecido de poder jugar a un deporte que te da tan buenos premios. Viajo a muchos sitios, conozco a mucha gente y veo mundo. Tengo mucha suerte de poder hacer lo que hago. Me encanta lo que puedo sacar de esto. Inspiras a mucha gente y puedes ayudar a muchos cuando acabes”, reconoce.